martes, 27 de octubre de 2020

Olor de rosas en una botella de lejía.


 

Nunca imaginé que iba a equiparar el olor a lejía al olor de rosas. No por el olor en sí, claro, eso nunca. Sino por el miedo  a la pérdida del sentido del olfato. El alivio que siento al ir a oler la lejía y constatar que la anosmia está aun lejos de mi nariz es inenarranable.

Texto e imagen: Ana&Heterónimas.©

Música: Kora Music

https://www.youtube.com/watch?v=0V0gq8DF2-0