¡Ay, Eva! Con lo feliz que estabas en aquel jardín nudista paseando entre los árboles con Adán. Alargabas la mano y comías. Nada de fregar platos. Jugabas con los ángeles, que aunque todo el mundo sabe que no tienen sexo, tocan como nadie la mandolina. Allí cotilleabas con la serpiente de asuntos banales y os echabais unas risas. Nada de asuntos científicos más allá del bien y del mal. A ti qué te importaban. ¿Y ahora qué? Aquello no era una manzana. Era la obligación de trabajar. Así que no vengas ahora con quejas sobre lo aburrido que resulta lavar y planchar todos los días la hoja de parra.
Texto e imagen: Ana S. ©
Música :Garden of Melancholy -The art of Mike Worrall https://www.youtube.com/watch?v=VgDdRUB_Tp4