Según Flaubert ”La palabra humana es como una caldera rota en la que tocamos música para que bailen los osos, cuando lo que de verdad queremos es conmover a las estrellas”.Yo no soy tan ambiciosa. A mí me bastaría con conmover a las margaritas antes de ser arrojadas a los cerdos. E incluso conmover a los mismos cerdos, ¿por qué no?
Texto e imagen: Ana&Rquía.©
Música: Irene Papas. Racines