Cada hombre, decía
Kafka, lleva en sí una habitación. Es un hecho que nos confirma nuestro propio
oído. Cuando se camina rápido y se escucha, en especial de noche cuando todo a
nuestro alrededor es silencio, se oyen, por ejemplo, los temblores de un espejo
de pared mal colgado….
Debido a mi extravagancia
yo llevo una casa entera. Me siento como un caracol estrafalario que navega
sobre el agua encrespada. Ni que decir tiene, que los temblores de tantos
espejos no me dejan dormir.
Texto:Kafka y
Ana & RquíaImagen: Ana & Rquía
Música :Farid Farjad – Hüzün http://www.youtube.com/watch?v=w1lIpO9HW1c