El primer día de clase el
maestro nos alineó y nos ordenó:”Que cada uno busque un sitio”y nosotros nos
dirigimos a las sillas. Un alumno no encontró sitio porque faltaba una. El
maestro le pilló de pie y le largó una bofetada. Para todos nosotros fue una
buena lección: no se debe tener mala suerte.
Texto: Bertolt Brecht
Imagen: Ana&Rquía.©