Dragón: Lagartija con obesidad mórbida. Los que están emparentados con los emperadores chinos gozan de buena fama. Sin embargo, aquéllos relacionados con un tal San Jorge no gozan de gran popularidad. Antaño se les podía encontrar en todos los continentes viviendo en grutas oscuras o bellos lagos, según su estatus social. Pero en la actualidad, la mayor parte de ellos viven en cuentos de hadas o cuentos de aventuras, dependiendo de la imaginación enfermiza del autor. Si la imaginación tiene sarampión, viruela o fiebre amarilla, en los cuentos de hadas. Si por el contrario, la imaginación padece de alguna infección hepática o problemas cardiovasculares, el dragón se mueve como pez en el aire en los de aventuras. Los hay de todas las formas y colores y suelen tener dos alas. Otros, más egoístas, cuatro, o incluso seis. Comen humanos y ganado. Generalmente cabras que se despeñan, aunque su comida favorita son las doncellas desvalidas y los niños. Su actividad principal es echar fuego por las fauces, actividad a la que dedican horas y horas. Y en todas las posturas posibles: de frente, de espaldas, a la pata coja, encima de un árbol. Su principal enemigo es el tedio, por eso, a pesar de su glotonería, a veces dejan alguna princesa con vida como señuelo para atraer a los príncipes matadragones, con el fin de que éstos les proporcionen un poco de diversión.
Texto e imagen: Ana&Rquía.©
Música: Little Dragon – Twice DRAGON