Todos
los días me visita el Ángel Exterminador. Me tienta con el aire libre. Sabe que
yo me vuelvo loca por todo aquello que lleve la palabra Libertad. Pero ignoro
sus tentaciones. Mientras me habla, acaricio, con suavidad, a mis mascotas y
dejo que sus palabras caigan, lentamente, en el vacío. Espero que al caer no se hagan daño.
Texto
e imagen: Ana&Heterónimas.©