A las palabras se las lleva el viento, me había dicho mi padre. ¿Y a dónde van? preguntaba yo.Pero mi padre nunca me contestaba.¿Y de dónde vienen? Y mi padre seguía callado. Yo las veía revolotear en el cielo como cuervos inquietos .Después cuando se cansaban de hacer círculos y más círculos, y solo para hacerme daño, se posaban en mi mente y me traían el ruido de los recuerdos.
Texto y fotomontaje : Ana&Rquía