Todos
los días, mientras paseo por el pasillo, mi mente, llena de perplejidad, interrogación y duda, no
deja de preguntarse si la pandemia nos
deja desear las mismas cosas que deseábamos antes de que apareciera. Vamos, si
podré ir de vacaciones. Y las respuestas son evidentes. No. No podré ir de
vacaciones. Pero yo no soy de rendición fácil. Mi máquina de los Sueños trabaja
a la misma velocidad que la máquina de las Pesadillas. Y a veces es más rápida.
Por eso me he prometido a mí misma que yo este verano piso arena como sea. ¿Qué
no puede ser en la playa? No importa. Tengo un reloj de arena que para un sueño
de emergencia es un artilugio poético insuperable que me permite jugar con las ilusiones aunque solo sea en un destello fugaz.
Texto
e imagen: Ana&Heterónimas.©
Música: Norah Jones -
Summertime
